SAO BORJA (Brasil). Ricardo Jara de Matos Júnior, profesional de la salud de São Borja, continúa recuperándose tras ser violentamente agredido por agentes de la Policía Rural y Ambiental de las Islas Corrientes (PRIAR) en el río Uruguay, en una zona perteneciente a territorio brasileño, según lo señala el diario brasileño Fohla de Sao Borja que sigue afirmando que los agresores fueron integrantes de la Delegación PRIAR de Santo Tomé. Sin embargo, apenas conocido el hecho, la esposa del enfermero agredido, manifestó en las redes sociales que eran “integrantes de la Marina argentina” quienes lo habrían agredido. La situación se vuelve más confusa cada vez más. Las agresiones ocurrieron en la madrugada del 28 de septiembre.
Según el informe médico, Ricardo sufrió un traumatismo craneoencefálico y múltiples lesiones en el brazo derecho y la mano izquierda, causadas por golpes con un remo de madera. Fue sometido a una cirugía de brazo y está mejorando gradualmente bajo supervisión médica. Se espera que esté de baja laboral durante al menos 90 días.
Según su esposa, Thaís Trindade Viçosa, el impacto psicológico ha sido el más difícil. «Ricardo siempre ha estado dedicado a su trabajo y a su familia. Ama su trabajo en el hospital y afronta este momento con mucha fortaleza», afirmó. La investigación de la Policía Federal se mantiene bajo secreto y se encuentra en una etapa avanzada. Las pruebas ya recopiladas, incluyendo imágenes y coordenadas geográficas, demuestran que el ataque ocurrió en territorio brasileño y que solo dos embarcaciones se encontraban en el lugar: la de Ricardo y la de PRIAR. «Las autoridades brasileñas señalan la responsabilidad directa de la policía argentina en el ataque, pero enfatizan que la continuación del proceso penal depende de la cooperación entre ambos países, ya que los agentes involucrados están bajo jurisdicción argentina», informó Thaís.
Señala además la publicación Folha de Sao Borja que «sasta la fecha, el gobierno argentino no ha publicado el registro de guardia, un documento considerado esencial para identificar a los tres agentes que se encontraban en la embarcación y participaron en el ataque a un ciudadano brasileño desarmado».
Según la mujer, el caso no deja lugar a dudas sobre los hechos. «La verdad ya ha sido confirmada. Lo que falta ahora es la valentía institucional de Argentina para reconocer y corregir la violencia cometida contra un hombre inocente», afirmó. No obstante y ante la insistencia que fueron policías argentinos los que supuestamente los agresores, vale recalcar que el PRIAR ni la Unidad Regional Quinta de Santo Tomé no posee lancha alguna.
Foto: Thais Viçosa/Divulgación
Ricardo Jara de Matos Junior
Fuente: Gelci Saraiva/Folha de São Borja y Radio Cultura




