SANTO TOME. Se trata la alcantarilla sobre el arroyo Itacuá, entre Santo Tomé y el paraje Atalaya. Resaltan que la situación no es tan grave como parecía. Tal como habían adelantado que técnicos de Vialidad Provincial evaluarían los daños en la Ruta Provincial 94 entre Santo Tomé y el paraje Atalaya. La ruta provincial 94 quedó anegada en parte por el avance de la creciente. Ahora que descendieron las aguas, evaluaron los daños sobre la calzada y debajo del cruce. No obstante, los pobladores del lugar están cada vez más impacientes debido a que no pueden circular en vehículos para ir al centro de la ciudad y esperan que los trabajos de reparación comiencen pronto. Solo piden que se autorice a circular vehículos por una sola mano mientras se ejecutan los trabajos.
Integrantes de un equipo técnico de Vialidad Provincial, junto al vice intendente Carlos Farizano y vecinos del lugar recorrieron y evaluaron los daños. Uno de los participantes, Santiago Eugenio López, maestro mayor de obras, jubilado de la Dirección Nacional de Vialidad y vecino del paraje Atalaya, este martes recorrieron la ruta al cumplirse 15 días de la interrupción de la circulación por los riesgos que implicaba.
El minucioso recorrido derivó en un informe técnico que denota lo siguiente: «Ante la situación suscitada debido a la creciente del río Uruguay, la cual ha ocasionado deterioros en el puente del arroyo Itacuá, motivo por el cual se ha interrumpido el tránsito a todo tipo de vehículos desde el día 23 de noviembre del corriente año».
Y agrega: «Ante la persistencia de esa interrupción del tránsito, como vecino y debido a mis actividades anteriores, y a la reunión que mantuvimos todos los vecinos del paraje y
en el cual adjuntamos nuestras pertinentes firmas, donde solicitaron mi apreciación respecto al estado actual de dicho puente, se considera que ya ha bajado notablemente el nivel del agua, y por ello se pudo visualizar el estado actual del mismo».
En este sentido, el informe expresa: «En la losa de aproximación Norte, L.D. (larga distancia) del mencionado puente existe una socavación debajo de dicha losa, no superior a los 0.30 metro (que sería la distancia entre la losa y el terreno existente). Dicho terreno se puede observar en las fotografías la colocación de vigas de madera rollizas colocadas paralelamente, observándose que debajo de ella no existe socavación, es decir que hay terreno firme, obviamente en estado de humedad».
Agregan que «en el L.I. (longitud) del mencionado lado Norte, no se observa socavación alguna (en la losa de aproximación). En las fotografías se puede apreciar que los gaviones de protección a la estructura de la alcantarilla están cumpliendo su función normalmente, no fueron desplazados ni desmoronados, lo que presupone que la protección está intacta».
El texto afirma que también se puede observar que la calzada no presenta grietas ni fisuras, lo que indicaría que la base de asiento no fue afectada. «Respecto a las fisuras que se observan, estas se produjeron ante el acceso de la senda peatonal, debido al descalce producido por las aguas, las cuales se pudieron apreciar (fotografías adjuntas) que no superan los 0.30 más». Y agrega: «Basándonos también en las fotografías panorámicas no se observan detalles de deterioros visibles».
Con información de Diario Epoca
Fotos: Drone, Machado»Negro»
