Tras la carrera de Rural Bike, el dueño del Portal Galarza se explayó sobre la actualidad del lugar
SANTO TOME. José Vizcaychipi, el propietario del predio “Portal Galarza” donde este año se estableció la llegada de los ciclistas que participaron de la prueba de rural bike “Desafío Iberá”, habló de la experiencia a un año de que dicho lugar haya sido arrasado totalmente por el fuego. Dejó entrever que la idea es consolidar Puerto Galarza como el lugar de recepción de esta competencia deportiva, al punto que proyecta construir una pista de entrenamiento para mountaín bike para que los fines de semanas los amantes de este deporte puedan llegar hasta Galarza y además de entrenar, hacer senderismo, y disfrutar del ecoturismo acompañados por la familia. También contó un poco la historia del lugar y de los lugareños, principalmente de su padre don José Vizcaychipi quien recientemente donó las 13 hectáreas que ocupa el paraje para que la gente del lugar pueda acceder a un plan de viviendas del INVICO.
Vizcaychipi inicialmente manifestó: “Es un día para festejar. Lamentablemente no vino mucha gente este año y se debe, creo, porque el evento se publicita boca a boca y porque estuvo chaparroneando lo que hizo que unos cuantos corredores se bajaran a último momento, pero es un riesgo siempre presente en cualquier evento deportivo que dependa de las condiciones climáticas para desarrollarse; lo importante es que la gente que vino lo pasó bien, encontró un lugar organizado, buena comida y a buen precio porque es muy importante para el turismo la relación precio calidad. La gente tiene que venir a pasear y al volver decir “fui a un lugar donde vi fauna y flora autóctona, donde me atendieron amablemente, con sanitarios limpios y en buenas condiciones, comí bien, y no me arrancaron la cabeza”, esa relación precio-calidad es vital para la actividad económica del ecoturismo, y creo que en este evento deportivo nosotros estuvimos a la altura de las circunstancias” aseveró.
A UN AÑO QUE EL FUEGO ARRASO CON TODO
Por otra parte, recordó que “el 05 de marzo de 2023 hizo un año y 15 días de una fecha donde la circunstancia era otra. En esa oportunidad el protagonista fue el fuego, nos convocó el incendio, la catástrofe, la desesperanza, el miedo; pero un año después nos encontramos en un lugar totalmente restaurado gracias al sector público de Corrientes, de Santo Tomé, de Ituzaingó, lo que fue muy importante al igual que el apoyo del gobierno municipal de Virasoro porque yo soy virasoreño aunque mi mamá es santotomeña y yo nací en Santo Tomé, simplemente me crie en Virasoro; me llena de alegría que hayan apostado a Puerto Galarza para hacer la recepción de esta edición del Desafío Iberá”, enfatizó.
TODO BIEN Y COSAS POR MEJORAR
Luego añadió: “La verdad que estoy muy contento porque todos los que vinieron antes de irse han pasado a saludarnos y a agradecernos por la atención. Supongo que esas caras felices son de gente conforme, pero más allá de eso, tenemos cosas que reajustar por lo que vamos a tener una reunión con Gustavo Cardozo, con José Augusto Suaid, con Juan Pablo Arroniz, para corregir porque esta fue nuestra primera experiencia en el Desafío Iberá, creo que debemos con los errores en fresco analizarlos y ver cómo hacer para no cometerlos el año que viene”, afirmó.
Más allá de la competencia y del resultado deportivo, el empresario turístico destacó que el hecho de que haya participado gente de otros lados como ser Entre Ríos, Misiones, Chaco, Brasil, entre otros, para promocionar el Portal Galarza de los Esteros del Iberá.
CICLISMO DE ANTES
En otro tramo de la entrevista, Vizcaichipi señalaba que “yo cuando era gurí de los ocho a los trece años hice ciclismo, de hecho, corrí mucho en Santo Tomé junto con Marcelo Araujo (ya desaparecido) y el club ciclístico de Virasoro, Posadas, y Santo Tomé tenía mucha gente y mucho prestigio; lo que sucede con el ciclismo de velocidad es que no hay infraestructura, y la gente tiene que pedalear en la ruta y eso es muy peligroso y por eso se ha desarrollado tanto el mountain bike, porque la gente entrena y corre en caminos rurales donde el riesgo es menor, y también es una actividad creciente porque convoca a la familia. El ciclismo de velocidad era otra cosa, por lo que el mountain bike va a seguir creciendo en Argentina y el Portal Galarza se va a posicionar para hacer este evento todos los años para lo cual vamos a armar una pista de entrenamiento in situ, para que la gente pueda venir los fines de semanas a entrenar acá, a hacer senderismo de mountain bike en Puerto Galarza donde aparte podrán disfrutar con la familia del lugar”, anunció.
DONACION
Dicho esto, Vizcaychipi comentó que su familia ha donado unas hectáreas para que el gobierno de la provincia pueda desarrollar algunos emprendimientos. “La gente del Paraje Galarza, paraje que debe tener 100 años, siempre fue dueña de su terreno por uso y por historia. Mi padre, don José Vizcaychipi vino a este lugar cuando tenía 20 años, le cambió este campo al finado don Pacho Szychowski, ya para ese entonces el paraje estaba dentro de su campo, y papá toda la vida supo que los terrenos y los lotes de los que vivían acá eran de ellos, no de él, a pesar de que figuraba en su título de propiedad. Después de los incendios y en esta crisis podemos decir que hay oportunidades; logramos el ordenamiento territorial, y mi papá junto al actual gobernador Gustavo Valdés hicieron un convenio para la donación de 13 hectáreas” afirmó.
TODO EN DOLARES
En ese marco Vizcaichipi se explayó aún más y afirmó que “en Colonia Carlos Pellegrini un terreno de 60 por 60 metros (3600 metros cuadrados) vale 80 mil dólares. Mi papá, don José Vizcaychipi donó 13 hectáreas a la gente del paraje Galarza, y lo hizo porque siempre supo que ellos eran los dueños de esas tierras, y los indicadores sociales daban para que la gente sea beneficiaria de un plan de INVICO, pero la titularidad no lo permitía, por lo que puedo decir que mi padre es el primer socialista que conozco que hace socialismo con sus recursos, mi papá don José Vizcaychipi donó 13 hectáreas a Corrientes para que el paraje Galarza pueda desarrollarse como se merece, para el porvenir de su gente, si eso no es tener conciencia social no sé qué es. Cuando hay un gesto de grandeza de un local, cuando hay convivencia pacífica, a pesar de tiroteos mediáticos y políticos, cuando hay inversión privada con toma de deuda del Estado, del CFI porque saqué 15 millones de pesos para reconstruir esto que es una realidad hoy hipotecando mi campo, y cuando hay sectores políticos que acompañan todo cuaja, y lo que podría ser un paraje olvidado como tantos que hay en nuestro país, es hoy un paraje que se está consolidando con un destino ecoturístico; cuando el Estado invierte en infraestructura la gente empieza a transformarse, y empiezan a llegar las inversiones privadas. Nosotros estamos invitando a los inversores privados a desarrollar el alojamiento que falta en Puerto Galarza para generar trabajo de calidad y el desarrollo local”, subrayó.
PERSONAL DEL LUGAR
Seguidamente agregó: “El personal de este establecimiento no trabaja para mí, ellos trabajan conmigo. Yo no soy su jefe, yo soy su líder; nosotros creemos en el crecimiento de las personas; ésta gente del paraje Galarza que tuvo como otra gente la suerte de poder formarse, de acceder la universidad; cuando les das oportunidad de ser parte de un proyecto tiene un potencial interminable, Luis Herrera en un líder local, él hace llorar a la gente cuando guía en la Laguna Galarza; Marcelo (hijo de Luis Herrera) guía y habla de plantas, de flores, de la medicina local, de los yuyos de las viejas, y eso es la experiencia de este lugar; y las decisiones de este lugar por lo general la tomamos en conjunto y yo los felicito a ellos en público y comparto lo éxitos, pero cuando las balas llegan yo soy el que me pongo adelante”, aseguró.
MOMENTOS TRISTES
Para finalizar la nota Vizcaychipi reconoció que hace un año atrás no tenía esperanzas luego de que el fuego arrasara con todo. “Fue uno de los momentos más triste de mi vida, pero un año después me encuentro otra vez de pie, rodeado de gente, acompañado por mi mujer que es mi gran compañera, mis padres, y la verdad que soy un tipo dichoso. Yo siempre fui un tipo rico, no adinerado que es otra cosa, pero sí rico por el apoyo que tengo, y por eso soy un agradecido a la vida. Tengo 43 años y de los 18 años sé lo que quiero hacer y sé dónde hacerlo que es acá. Yo estudié agronomía, pero cuando estaba haciendo la facultad en la Universidad de El Salvador en Desiderio Sosa, en tercero o cuarto año me di cuenta que no me gustaba la agronomía, que me gustaba esto, pero no le podía ir a decir a papá que no quería seguir más la carrera, que quería hacer turismo, porque para entonces mi viejo estaba muy mal económicamente, y hacía un esfuerzo enorme para que yo estudiara, por lo que seguí y me recibí para darle fuerzas a papá; pero ir a la facultad, leer muchos libros, rendir exámenes, conocer gente, también me ayudo a formarme, a darme recursos. Después viajé, fui peticero, cuidé caballos en Inglaterra, hice asados de corderos, fui fletero, hice de todo, y en el 2010 regresé a la Argentina con unos 40 mil dólares para invertir acá, esos 40 mil dólares que vienen de afuera, si bien no es mucho, es la plata que engorda, que mejora el país y lo bueno de todo esto es que nunca reniego de lo que hago, lo disfruto”, resaltó.