Alvear: Camión cargado con arroz cae a las aguas del rio Uruguay
ALVEAR. Un camión con 45 toneladas de arroz se precipitó ayer sobre el río Uruguay, luego de un desperfecto técnico y una «mala maniobra» del conductor en Alvear. Por el incidente no hubo heridos y tras una maniobra de acarreo asistido, pudo volver a su viaje rumbo a Brasil. (Foto: Anly Producciones)
El incidente ocurrió alrededor de las 9, en el puerto que une -a través de balsas y remolcadores- Alvear con Itaquí (Brasil). La trompa del pesado vehículo cayó al agua y se vivieron momentos de tensión. La dificultad más grande se presentó al momento de acomodar el acoplado.
El intendente de Alvear, Miguel Salvarredy, explicó, en una entrevista con diario época, los motivos del accidente: «En el momento en que el camión subió a la balsa, se cortó una de las lingas de acero del portalón (rampa de acceso a la embarcación). Al instante, el conductor se asustó, dio marcha atrás y se le cruzó con su mismo acoplado», precisó. Vale recordar que este es uno de los tres pasos fronterizos que tiene la provincia sobre el río Uruguay.
Finalmente, un segundo intento logró ubicar al acoplado en posición. «Luego, se dio vuelta la balsa y se subió al camión por el otro lado, donde las lingas estaba en buen estado, ya que tiene un portalón de subida y uno de bajada», acotó Salvarredy. El Jefe comunal remarcó que fue la primera vez que ocurre un siniestro de este tipo y, afortunadamente, no hubo que lamentar heridos.
«Evidentemente, la linga estaba en mal estado, ya que es raro que se rompa porque vienen adaptadas para soportar 45.000 kilogramos de carga de arroz», analizó el Jefe comunal. Por día, el cruce es utilizado por decenas de empresas correntinas que llevan su producción hacia tierras brasileñas, principalmente por arroceras.
En videos y fotografías publicadas por las redes sociales, se pudo ver cómo el vehículo fue asistido por otro de la misma empresa. Desde su parte trasera fue enganchado por un camión para retirarlo de una zona lodosa, por lo que las ruedas no podían «hacer pie». Un primer intento resultó fallido, ya que el cable con el que se intentó arrastralo se cortó, provocando un fuerte susto entre los operarios y curiosos presentes.
Fuente: Epoca
